Desde hace una década, el boom de la construcción en Marruecos ha provocado que se vulneren todas las normas medioambientales. Prima el dinero sobre el planeta. En torno a ello, se ha creado un mercado clandestino que los sectores legales no pueden satisfacer para ejecutar proyectos titánicos. La arena, material esencial para la fabricación de hormigón, es el objeto más codiciados para las grandes extracciones ilegales. La magnitud del tráfico de arena en Marruecos es tal que en algunos lugares han desaparecido playas enteras. Miles de personas por todo el país se ganan la vida con estas actividades. Armados con palas y acompañados de burros cargados de cestas, llegan todos los días a sacar arena de las playas marroquíes por unos 6 euros la jornada. Es muy extraño que alguien se atreva a rebelarse o a denunciar a las poderosas mafias de la arena. En los lugares de las obras, los constructores afirman que no conocen el origen de la arena que utilizan. Sin embargo, la arena de mar en crudo, que se utiliza con frecuencia en la construcción, puede provocar graves problemas de seguridad. Cada año, el sector de la construcción contabiliza cerca de 60.000 accidentes en Marruecos. Puedes ver video en YouTube a continuación: Marruecos: La mafia de la arena.